Una de las cosas lindas de la industria del queso, es la comunidad que se ha formado de amantes y protectores de este oficio. Durante años se ha realizado un trabajo minucioso para que la producción de estos lácteos sea cada vez más sustentable y así, posible de proyectar en el futuro con la misma calidad.
Este es un vino que resulta del ensamblaje de Cabernet Sauvignon (85%), Syrah (13%) y Petit Verdot (2%), lo que produce las notas a grosellas, guindas ácidas, chocolate, canela y vainilla que presenta este tinto del Valle Central chileno. Las uvas para este vino se cosechan manualmente entre la última semana de abril y la primera de mayo, para alcanzar el potencial máximo de aromas varietales y una correcta maduración de taninos de variedad, que serán suaves y armoniosos en boca. Se recomienda acompañar de quesos maduros y carnes asadas, descorchando 15 minutos antes para dejar que los aromas se expresen libremente.
Este es uno de los quesos más elegantes de La Cabra Julia, se elabora con la leche más fresca de la cabra que luego es pasteurizada. Además, este queso ha sido aromatizado con hierbas frescas y aceite trufado que le dan ese toque único y sabroso.
Este cava con denominación de origen nació en la búsqueda por elaborar el mejor cava y con el menor impacto al planeta. Y es que ese respeto a la tierra y sus frutos se manifiesta a la hora de probar este Vilarnau de calidad excepcional, el que además de ser orgánico es apto para veganos. Posee burbujas pequeñas y muy ordenadas, que liberan aromas a frutos como el durazno, la ciruela, el níspero, junto a otras notas florales que van aportando frescura. En boca es una cava suave, cremosa, fresca y elegante, siendo ideal en el aperitivo una copa de Vilarnau.
Este queso de pasta blanca y uniforme se elabora con leches de cabra, oveja y cabra, obteniendo un color novedoso algo azulado o grisáceo con vetas de tono verde. Es perfecto para esos picoteos con verdaderos amantes del queso.
QUESO CABRA:
Este es uno de los quesos favoritos de El Roble. Tiene una suave fragancia a nuez y es delicado, armonizando a la perfección con vinos blancos afrutados y acompañando ensaladas, por ejemplo. Se recomienda mantener refrigerado para conservar intactas sus propiedades que de alguna manera hacen pensar en el verano.
QUESO AHUMADO:
El ahumado de este queso provoca un aroma muy marcado y especial. Se elabora usando madera de roble, logrando así una corteza de color cobre amarronado. Con sabor fuerte e inconfundible, se conserva durante largos períodos de tiempo. Armoniza a la perfección con algún vino Gran Reserva maduro y fuerte, pero también con algún tinto exuberante.
QUESO LAMINADO:
Este queso presenta una textura semi blanda y de color amarillo. Su aroma suave antecede el sabor tradicional del campo chileno. Además, la distribución de ojos en forma regular y proporcionada al interior de la masa, ofrecen un gran sabor para disfrutar en sándwich. Un queso ideal para hacer parte de nuestro día a día de manera sabrosa y natural.